

Si tuviera que mirar desde un balcón los
mundos autónomos que surgen del
segundo disco de Pascual Márquez, solo
podría decir que sería como ver el mar,
18 de Julio, una cancha de fútbol,
y Tristán Narvaja, todo
al mismo tiempo
Si
tuviera que mirar desde un balcón los mundos autónomos que surgen del
segundo disco de Pascual Márquez, solo podría decir que sería como ver
el mar, 18 de Julio, una cancha de fútbol, y Tristán
Narvaja,
todo
al mismo tiempo. En 2022, salen a la luz once canciones, cuya base
instrumental es, en su mayoría, un power
trio
clavadísimo, dando origen a lo que para mí es uno de los mejores discos
de la música popular nacional actual. Otros instrumentos terminan de
armar la atmósfera orgánica y experimental de todo el disco, así es que
encontramos coros, flautas, vientos, guitarras eléctricas,
sintetizadores, y distintos instrumentos de percusión.
Hay un
trabajo sutil de instrumentación en cada tema, que va directamente de la
mano con las letras. Una mezcla de lenguajes y géneros se amolda al
centro de cada canción, conjugando lo sofisticado con lo popular, sin
sonar pretencioso. Así abre el disco DISTRACCIONES,
una canción con melodías arabescas que nos presenta ya varias de las
características estilísticas del álbum: melodías armonizadas con voz y
guitarra, un aire candombero algo difícil de reconocer para quien tiene
un corto oído musical, y una poética clara, como el estribillo de esa
primera canción: “En Propios y Asilo / me hago el distraído / perifar y
alivio / sexo sin amor / casi que me miento / hambriento el pavimento /
pide tu regreso aún”.
Todo el disco es una especie de
cartografía, no solo geográfica sino también cultural, de la canción
montevideana: “A tu encuentro lo que nunca falta / vino tinto debajo de
las mangas”, dice en MANDARINAS,
que se sugiere por momentos como una murga canción. BIZCOCHO
Y COCAÍNA
es una burla a la policía: “Se va acomodando la gorra / sudando la gota
gorda / de placeres que no están. / Meta bizcocho y cocaína / dieta del
que no suicida / por falso amor oriental”. Y este chiste llega con forma
de samba, a presentar otra característica clave en este disco: la
política ligada al humor. Por ejemplo en la última canción, PEREZA
(UNO),
grabada por mucha gente a la vez, donde todos cantan y tocan percusión,
como un mensaje generacional festivo, reivindicando las bendiciones del
tiempo al pedo: “Tengo muchos libros que no leí / miro los dibujos los
dejo ahí. / Tengo una pereza que me sienta bien / y no me da nada de
culpa”.
Tanto en LISTA
DE COMPRAS;
una enumeración de todas las falsas necesidades provocadas por el
consumo demente en el que nos encontramos, como en TELEMUNDO!,
la
ironía se vuelve un medio para hacer estos guiños: “Telemundo informa y
no deja / jamás ir pa la rambla / siempre se viene la fea / y sino viene
te previene igual”. El atomice de los medios de comunicación y el
pesimismo de los informativos, junto con lo gracioso de las referencias
concretas que hay en la canción, van acompañadas de unas melodías más
rockeras al estilo de Charly García.
También 18
POP
tiene un estribillo pegadizo y muy divertido que dice “Es como el himno
nacional / ya a nadie le importa de verdad / pero todos saben la letra”.
Con respecto a este par de canciones, me queda la sensación que desde
desde la interpretación vocal o la mezcla de la voz se podían haber
metido más a fondo con la estética rock-pop.
La voz de Pascual
tiene un timbre con algo de Mateo que suena tierno, e incluso, inocente.
Eso hace que en las canciones más acústicas su voz se escuche totalmente
fundida con el resto de los instrumentos, y en algunos casos, como lo es
FRACTAL
DE ENERO
-personalmente, mi preferida- permita conectar inmediatamente con la
belleza y la simpleza de las imágenes, hasta en lo hermoso de comerse,
cada tanto, algunas que otras “s”, como en el inicio de la canción:
“Conocí tus pie´ junto con el sol / y sé que pronto volverán / a su
lugar como yo. / Puedo envejecer / como una amistad / dejar mis cosas /
puedo pensar hasta desaparecer”. En ese tipo de composición, más
“cabreresca”, su voz funciona perfecto, pero me queda la sensación de
que en las propuestas más irónicas y satíricas -que son las más
rockeras/poperas-, su voz podría sonar más agresiva, más
suelta.
Volveré sobre un punto clave en este disco: las
letras. Creo
que la poética de Pascual sobrevive por sí sola.
Siempre digo que para comprobar si una canción es al mismo tiempo un
poema, hay que sacarle la música y ver si banca. Todas las letras de
este disco lo logran. La
sencillez con la que se espía lo cotidiano, sumado a la naturalidad de
las frases, permiten captar que lo que debía decirse, tal y como debía
ser dicho, se dijo.
Pensemos en PAREDES
PARLANCHINAS:
“Yo no me espantaría / de ver tus peores caras / es mucho más espeso si
es que bajas la mirada / como cuando amenaza todo el día y no se
larga”.
Los temas son variados: la ansiedad de la actualidad, la
ciudad, el ocio, el consumo, el desamor, la cotidianeidad, las
convenciones sociales, el absurdo. Sobre estas dos últimas, GRACIAS
JOR resulta
un canto al absurdo: “Lustro las botas con indiferencia / perros
youtubers anuncian la guerra y yo / estoy balconeando / y si pasa un
turista / soy una princesa tercermundista.” Podemos entrever juegos
compositivos del estilo de El Príncipe, irreverentes y llenos de gracia,
y cosas puramente propias: ese aire de guitarreada, de cantarola al aire
libre, de tambores, y vino. Además, se despide homenajeando a la canción
“Comanche” de Jorge Ben Jor, cantando en grupo, como dice el tema
original:
“Enquanto existir Deus no céu / eu vou cantando gente
boa”.
Hay una canción -la dejé para el final a consciencia-
que me resulta un misterio. TUS
QUERIDOS CON TUS JUEGOS
devela un mundo totalmente experimental, donde parece primar el plano
sonoro de las palabras: “Entretienes entre tiempos / entre tus queridos
con tus juegos. / Eso es importante / tanto como el tiempo”. Conecto
esta canción con la influencia de las bandas “Mansalva” y “Animales de
poder”, de hecho algunas de sus integrantes participaron en este
álbum.
Habiendo sobrevolado todas las canciones que componen
BALCONES,
a la vista está que es un proyecto ambicioso, múltiple y lo mejor -a mi
modo de ver las cosas-: sincero. Este
disco es la muestra de una sensibilidad fresca y antigua, de una voz que
merece ser escuchada, porque habla sobre lo que pasa a la corta, en el
mundo real, y sobre lo que pasa adentro, en las profundidades de un
alma.
Si todavía no te arrimaste al horizonte infinito que se ve desde cada
uno de estos balcones, te diría que está ideal para echarse a escuchar
como un perro al sol. Probablemente descubras en alguna de estas
canciones, la más hermosa flor.
Por La Gata Bajo la Lluvia
Diciembre del 2024
Reseña
//
cuchicheo
revista.cuchicheo
Crónicas
Composición,
letra, guitarras y voz:
Pascual
Márquez
Bajo:
Felipe
Giordano
Batería:
Track
1, 2, 3, 5, 6, 8 Felipe
Ritorni
Track
9 Jerónimo
Lamas
Track
10,
Patuco López
Participaron
en vientos, voces, percusión, palmas y/o aplausos: Franco
Altez, Mateo Altez, Eva Luna Avoletta, Eloísa Avoletta, Juan Ignacio
Belzarena, Mika Echeverría, Agustina Aranda, Juan Geronés, Diego Lois,
Santiago (Negro) Minarrieta, Renata Denevi.
Mezcla
y edición: Juan Manuel (J) Puñales
Master:
Diego
azar y Juan Manuel (J) Puñales
Supervisión
de mezcla: Patuco
López
Arte
: Emilia
Márquez
Grabado
entre 2019 y 2021 principalmente en La Castilla (Ciudad
Vieja).
FICHA TÉCNICA
Diciembre del 2024
//
Reseña
revista.cuchicheo

Si
tuviera que mirar desde un balcón los mundos autónomos que surgen del
segundo disco de Pascual Márquez, solo podría decir que sería como ver
el mar, 18 de Julio, una cancha de fútbol, y Tristán
Narvaja,
todo
al mismo tiempo. En 2022, salen a la luz once canciones, cuya base
instrumental es, en su mayoría, un power
trio
clavadísimo, dando origen a lo que para mí es uno de los mejores
discos de la música popular nacional actual. Otros instrumentos
terminan de armar la atmósfera orgánica y experimental de todo el
disco, así es que encontramos coros, flautas, vientos, guitarras
eléctricas, sintetizadores, y distintos instrumentos de
percusión.
Hay un trabajo sutil de instrumentación en cada
tema, que va directamente de la mano con las letras. Una mezcla de
lenguajes y géneros se amolda al centro de cada canción, conjugando lo
sofisticado con lo popular, sin sonar pretencioso. Así abre el disco
DISTRACCIONES,
una canción con melodías arabescas que nos presenta ya varias de las
características estilísticas del álbum: melodías armonizadas con voz y
guitarra, un aire candombero algo difícil de reconocer para quien
tiene un corto oído musical, y una poética clara, como el estribillo
de esa primera canción: “En Propios y Asilo / me hago el distraído /
perifar y alivio / sexo sin amor / casi que me miento / hambriento el
pavimento / pide tu regreso aún”.
Todo el disco es una
especie de cartografía, no solo geográfica sino también cultural, de
la canción montevideana: “A tu encuentro lo que nunca falta / vino
tinto debajo de las mangas”, dice en MANDARINAS,
que se sugiere por momentos como una murga canción. BIZCOCHO
Y COCAÍNA
es una burla a la policía: “Se va acomodando la gorra / sudando la
gota gorda / de placeres que no están. / Meta bizcocho y cocaína /
dieta del que no suicida / por falso amor oriental”. Y este chiste
llega con forma de samba, a presentar otra característica clave en
este disco: la política ligada al humor. Por ejemplo en la última
canción, PEREZA
(UNO),
grabada por mucha gente a la vez, donde todos cantan y tocan
percusión, como un mensaje generacional festivo, reivindicando las
bendiciones del tiempo al pedo: “Tengo muchos libros que no leí / miro
los dibujos los dejo ahí. / Tengo una pereza que me sienta bien / y no
me da nada de culpa”.
Tanto en LISTA
DE COMPRAS;
una enumeración de todas las falsas necesidades provocadas por el
consumo demente en el que nos encontramos, como en TELEMUNDO!,
la
ironía se vuelve un medio para hacer estos guiños: “Telemundo informa
y no deja / jamás ir pa la rambla / siempre se viene la fea / y sino
viene te previene igual”. El atomice de los medios de comunicación y
el pesimismo de los informativos, junto con lo gracioso de las
referencias concretas que hay en la canción, van acompañadas de unas
melodías más rockeras al estilo de Charly García.
También
18
POP
tiene un estribillo pegadizo y muy divertido que dice “Es como el
himno nacional / ya a nadie le importa de verdad / pero todos saben la
letra”. Con respecto a este par de canciones, me queda la sensación
que desde desde la interpretación vocal o la mezcla de la voz se
podían haber metido más a fondo con la estética rock-pop.
La voz
de Pascual tiene un timbre con algo de Mateo que suena tierno, e
incluso, inocente. Eso hace que en las canciones más acústicas su voz
se escuche totalmente fundida con el resto de los instrumentos, y en
algunos casos, como lo es FRACTAL
DE ENERO
-personalmente, mi preferida- permita conectar inmediatamente con la
belleza y la simpleza de las imágenes, hasta en lo hermoso de comerse,
cada tanto, algunas que otras “s”, como en el inicio de la canción:
“Conocí tus pie´ junto con el sol / y sé que pronto volverán / a su
lugar como yo. / Puedo envejecer / como una amistad / dejar mis cosas
/ puedo pensar hasta desaparecer”. En ese tipo de composición, más
“cabreresca”, su voz funciona perfecto, pero me queda la sensación de
que en las propuestas más irónicas y satíricas -que son las más
rockeras/poperas-, su voz podría sonar más agresiva, más
suelta.
Volveré sobre un punto clave en este disco: las
letras. Creo
que la poética de Pascual sobrevive por sí sola.
Siempre digo que para comprobar si una canción es al mismo tiempo un
poema, hay que sacarle la música y ver si banca. Todas las letras de
este disco lo logran. La
sencillez con la que se espía lo cotidiano, sumado a la naturalidad de
las frases, permiten captar que lo que debía decirse, tal y como debía
ser dicho, se dijo.
Pensemos en PAREDES
PARLANCHINAS:
“Yo no me espantaría / de ver tus peores caras / es mucho más espeso
si es que bajas la mirada / como cuando amenaza todo el día y no se
larga”.
Los temas son variados: la ansiedad de la actualidad, la
ciudad, el ocio, el consumo, el desamor, la cotidianeidad, las
convenciones sociales, el absurdo. Sobre estas dos últimas,
GRACIAS
JOR resulta
un canto al absurdo: “Lustro las botas con indiferencia / perros
youtubers anuncian la guerra y yo / estoy balconeando / y si pasa un
turista / soy una princesa tercermundista.” Podemos entrever juegos
compositivos del estilo de El Príncipe, irreverentes y llenos de
gracia, y cosas puramente propias: ese aire de guitarreada, de
cantarola al aire libre, de tambores, y vino. Además, se despide
homenajeando a la canción “Comanche” de Jorge Ben Jor, cantando en
grupo, como dice el tema original:
“Enquanto existir Deus no céu
/ eu vou cantando gente boa”.
Hay una canción -la dejé para
el final a consciencia- que me resulta un misterio. TUS
QUERIDOS CON TUS JUEGOS
devela un mundo totalmente experimental, donde parece primar el plano
sonoro de las palabras: “Entretienes entre tiempos / entre tus
queridos con tus juegos. / Eso es importante / tanto como el tiempo”.
Conecto esta canción con la influencia de las bandas “Mansalva” y
“Animales de poder”, de hecho algunas de sus integrantes participaron
en este álbum.
Habiendo sobrevolado todas las canciones que
componen BALCONES,
a la vista está que es un proyecto ambicioso, múltiple y lo mejor -a
mi modo de ver las cosas-: sincero. Este
disco es la muestra de una sensibilidad fresca y antigua, de una voz
que merece ser escuchada, porque habla sobre lo que pasa a la corta,
en el mundo real, y sobre lo que pasa adentro, en las profundidades de
un alma.
Si todavía no te arrimaste al horizonte infinito que se ve desde cada
uno de estos balcones, te diría que está ideal para echarse a escuchar
como un perro al sol. Probablemente descubras en alguna de estas
canciones, la más hermosa flor.
cuchicheo

Por La Gata Bajo la Lluvia
Si tuviera que mirar desde un balcón los mundos autónomos que surgen del segundo disco de Pascual Márquez, solo podría decir que sería como ver el mar, 18 de Julio, una cancha de fútbol, y Tristán Narvaja, todo al mismo tiempo
FICHA TÉCNICA